La presunta comisión de un delito de administración desleal por parte del administrador de una empresa fue objeto de juicio ayer en la Audiencia provincial de Ourense. La fiscalía reclama una condena de año y medio de prisión para Emilio C. F., quien se declaró como inocente de los cargos imputados durante la vista por este caso, y aseguró que su gestión había sido correcta.
El acusado solo quiso responder a preguntas de su abogado, a las cuáles explicó que la empresa tenía un único activo, un inmueble situado en la localidad lusa de Vilanova da Veiga, en Chaves, el cual alquilaron a una sociedad que se encargaba de gestionar un geriátrico y que los ingresos que provenían de ese alquiler eran los únicos que entraban en su negocio. También declaró que cinco mil euros mensuales que venían de ese dinero, se derivaban al pago de la comida de los internos en la residencia.
A lo largo de su declaración, el acusado también reconoció que se declararon dos concursos de acreedores sobre la empresa, tanto en Ourense como en Portugal. En todo caso, las autoridades lusas se declararon competentes para ver ese asunto. A raíz de todo esto se nombró un administrador concursal que habría supervisado todos los movimientos que hizo el acusado y el dinero que ingresaba la empresa. Por ello esta parte reclama la absolución, ya que considera que no existió ningún delito.
